Este año se cumple el centenario del inicio de la I Guerra Mundial, conocida como la Gran Guerra, y en IberLibro queremos recordar como este dramático hecho marcó a muchos escritores de la época, quedando plasmado en sus obras.
Hemingway dejó sus estudios para conducir una ambulancia de la Cruz Roja en el frente italiano, y sus experiencias influenciaron su trabajo posterior, sobretodo su novela de 1929 Adiós a las armas.
Al estallar la I Guerra Mundial se alistó en el ejército en los Reales Fusileros Galeses. Enviado al frente, los horrores que presenció en el campo de batalla le marcaron profundamente. Aunque fue más conocido como poeta de guerra, Graves escribió el icónico libro autobiográfico Adiós a todo eso (1929).
Este autor francés se alistó a la armada a los 41 años. Escribió sobre la destrucción de la guerra en su famosa novela El fuego (1916).
Se incorporó a filas en 1914 a los 18 años y estuvo en primera fila de combate hasta el final de la guerra. Su libro El miedo (1930) es uno de los menos conocidos del autor debido a la censura que sufrió. A pesar de ello, es uno de los mejores relatos en primera persona sobre la I Guerra Mundial.
Este novelista británico sirvió en el frente occidental de 1916 a 1918, y nunca ser recuperó completamente de dicha experiencia. La muerte del héroe, publicada en 1929, fue su respuesta literaria a la guerra.
6. Arnold Zweig
Las experiencias de este autor alemán en la I Guerra Mundial lo impactaron tanto que después de la guerra se convirtió en un pacifista militante. Fruto de esas experiencias, en 1927 escribió El sargento Grischa, considerada como una de las mejores novelas bélicas.